jueves, 29 de octubre de 2015

Entre crueldad e inteligencia

Incontables veces he escuchado o leído como satanizan al ser humano, si bien, somos la especie por excelencia que "razona" y que usa la inteligencia para cambiar su medio e interactuar con él, así como con otras especies, no somos la única; mucho se ha hablado de los delfines y su inteligencia, pero es cierto, como el principal tópico de este Blog, que la naturaleza y otras especies, no sólo animales, nos muestran la crueldad con la que interviene "la madre naturaleza", por decirlo de manera poética.

Muchos animales han desarrollado una inteligencia que a veces es difícil de entender para nosotros, y que causa asombro, y que algunas personas, no todas, que tachan de discriminación interespecies, a.k.a. "especismo" parece que ellos son los que infravaloran esta característica y sólo se la adjudican al ser humano como don divino.

Uno de mis animales favoritos son los cuervos, en especial el cuervo grande Corvus corax, aparte de su elegante pose y brillante color negro, su inteligencia e ingenio debería ser causa de envidia de muchas aves y de alguno que otro humano *¡cof cof!*. Los resultados de estudios a estos asombrosos animales, van desde capacidades inigualables de hablar, resolver problemas de sacar semillas de frascos, hasta entender, de manera práctica, el principio de Arquímedes; como funcionan los semáforos, hasta las zonas seguras donde transita el ser humano.

Corvus corax, ejecitando un llamado (canto). Tomado de  http://www.arkive.org/raven/corvus-corax/image-A24637.html

En esta ocasión hablaré sobre el caso del "estanque de la muerte", este acontecimiento sucedió por allá del 2004 o 2005, en el Barrio de Alstona, Hamburgo; una mañana, los lugareños escucharon como si algo explotara, fueron a investigar sobre la causa del extraño sonido, y su asombro fue encontrar varios cuerpos de sapos diseminados a las afueras del estanque, a incluso lograron alcanzar a observar como uno de ellos, hinchado y con los ojos a punto de reventar, explotaba y lanzaba sus vísceras y jirones de sapo por el lugar.

Este suceso se repitió los días siguientes hasta alcanzar más de 1000 cuerpos de sapos desperdigados por la zona y flotando en el estanque. la noticia se diseminó como pólvora y llego rápido a las noticias locales; varios expertos fueron a investigar el porqué de este extraño acontecimiento, muchos adjudicaron esto a la calidad del agua, que rápidamente se descartó al obtener los resultados de los estudios; otros decían que era por causa de virus, incluso se llegó a mencionar que era una forma de suicidio por parte ellos para el control de población. Al no tener algo concluyente, la prensa no tardó en bautizar este lugar como "el estanque de la muerte".

Fue hasta que el Dr. Frank Mutschmann observó los cuerpos de sapos que aun estaban completos, notó que en la parte posterior tenían un hueco y les faltaba el hígado, nuevamente la gente se apresuró a comentar el ataque masivo de zorros, perros, gatos, e incluso hurones o comadrejas, otorgando, nuevamente la inteligencia a mamíferos, sin embargo el Dr. Mutschmann concluyó que ese agujero era hecho por el pico de un ave, concretamente por cuervos; el asegura que poseen la inteligencia suficiente para conocer que lo único comestible no tóxico de los sapos es su hígado.

Para aquellos que desconozcan las defensas de los sapos por un lado está que segregan una toxina que recubre su piel en forma de mucus para ser incomestibles, por otro lado se llenan de aire y se hinchan para aparentar tener un tamaño mayo y actuar amenazantes para intimidar a sus depredadores; lo que además agrega el Dr. Mutschmann es que no se dan cuenta hasta que el cuervo los ataca desprevenidos y ha picado por la espalda para extraer su hígado libre de toxinas, acto seguido, el sapo comienza a hincharse, al no tener ya el hígado, que es el soporte de los pulmones ya que los sapos no tienen diafragma, estos últimos comienzan a inflarse de manera desmedida, reteniendo aire hasta explotar por completo. Finalmente destacó que es probable que un cuervo observó el comportamiento de los sapos y aprovechó la época de apareamiento para poder atacarlos y ellos se mantuvieran distraídos; otros cuervos al observar la manera de comerlos sin envenenarse, aprendieron por observación, y denota su asombrosa capacidad de razonamiento e inteligencia.

Sapo con su cuerpo inflado en su posición de defensa. arkive.org

Como ven, este mundo esta lleno de seres con capacidades asombrosas, y en algunos casos terroríficas, que a veces despreciamos, por ego o ignorancia, y que no está por demás conocer para amar la naturaleza. ¿Tú qué opinas?

Si tienen dudas o comentarios, no olviden dejarnos un mensaje para poder darle seguimiento.

-Jaén

Osos Polares Caníbales

Se ha vuelto viral un conjunto de imágenes que muestran a un oso polar alimentándose de un cachorro de su misma especie. El canibalismo en osos polares se señala como una consecuencia terrible del calentamiento global: los hielos se derriten, los osos pasan hambre, y, en consecuencia, matan a las crías para poder sobrevivir.
Tanto ha sido, que incluso fotografías de este estilo fueron difundidas en la Cumbre de Copenhague de 2009 sobre Cambio Climático. Como podemos ver, el escándalo producido por estas observaciones no es tan reciente.
Oso polar macho alimentándose de un oso más joven. Fotografía tomada de: http://news.discovery.com/earth/global-warming/when--bears-attack-other-polar-bears.htm
Antes de atar cabos, debemos conocer un poco más sobre la biología de esta especie. El oso polar (Ursus maririmus) es el depredador terrestre más grande sobre la Tierra (de entre 300 y 600 kg, pero pueden llegar hasta 1 ton.). Al vivir en una zona prácticamente carente de vegetación, el oso polar vive de carne exceptuando algunos brotes en verano, es considerado el único supercarnívoro del círculo polar ártico. 
Imagínense las condiciones de vida en el polo: con temperaturas congelantes prácticamente todo el año, el oso polar tiene una enorme masa y grueso pelaje que le ayudan a no perder el calor y morir de frío. Sus presas más habituales (las focas) son marinas y sólo se acercan a las zonas cubiertas de hielo a respirar y parir. Es en esos momentos  cuando los osos las cazan, sin embargo pueden ndar kilómetros en busca de alimento. Es este apego al mar lo que le da su nombre de marinus.
Pero decir que el oso polar vive sólo de focas sería exagerado. Encontrándose en una zona tan hostil, el oso necesita cada gramo de alimento que pueda consumir, y esto incluye morsas, ballenas, aves, huevos, zorros, carroña y, (claro que si) su propia especie.
Podría decirse que si los osos tienen a la mano alimento más fácil de cazar que otro de su misma especie, lo tomarán, y que si no está disponible, aumenta la probabilidad de canibalismo. Esa es la hipótesis que se ha difundido.
Pero volvamos a la cuestión de la población. Lo que se dice observar, es que ha ocurrido un aumento de casos de canibalismo. En realidad, se han observado (registrado) más casos de canibalismo, pero esto puede deberse a factores distintos del derretimiento de los polos por el calentamiento global:
1) En primer lugar, existe en la biología de campo un término llamado "esfuerzo de colecta". Voy a explicarlo con sencillez: Si van diez personas a un terreno de cierta extensión, y entre todos buscan, digamos, la presencia de determinada planta durante dos horas, la probabilidad de encontrar dicha planta sería mayor a la que si fuera sólo una persona aunque buscara por dos horas, o a si fuera el mismo número de personas pero sólo buscaran por 5 minutos. Por eso, cuando se hace una comparación de este tipo sebe tomarse en cuenta la cantidad de personas dedicadas a observar y por cuánto tiempo lo hacen. De la misma manera, se sabe que, hasta hace pocos años, la cantidad depersonas que volvíab los ojos al ártico eran menores. En la actualidad viajar a esa zona es menos difícil, y hay más razones para hacerlo, de esa forma la cantidad de observaciones de todo tipo aumentarán.
2) Existe una hipótesis (basada en observaciones de varios años) en la que los años en los que el hielo es más denso, es en los que se han observado más casos de depredación. Se cree que, en momentos donde la población de osos es mas grande, aumenta el número de encuentros de madres y sus crías con osos macho, y esto a su vez aumenta la probabilidad de que éstos devoren a las crías.
3) En casos que se han reportado de depredación, los predadores han sido osos adultos en buena condición física (recordemos que un oso polar puede perder hasta la mitad de su masa corporal en invierno) e incluso pueden estar grandes y gordos. (Stirling y Ross, 2011), y de hecho, existe un sólo caso documentado donde el oso acometedor de infanticidio y canibalismo se encontraba famélico y fue en los ochentas.
Entonces, si no es por hambre, ¿porqué un oso polar haría esto? Veamos los móviles. El oso polar es un carnívoro activo, poco selectivo con su presa (tanto así que se le ha visto incluso comer aceite de coche y basura alrededor de ciudades polares), Así que en principio, todo lo que se mueva va a ser suficientemente atractivo para comerlo (en este caso podríamos exceptuar a las hembras madres, cuyo instinto evita que devoren a sus hijos, pues en la mayoría son machos los que cometen canibalismo). Y derivado del anterior podemos ver el principal instinto de cualquier ser vivo una vez asegurada la propia supervivencia: la reproducción.
Pero, ¿que comerse a la propia especie no sería negativo para la especie?
Imagínate esto: Eres un oso macho viviendo en uno de los lugares más inhóspitos y solitarios del planeta, y te encuentras con una hembra y su cría. Tienes ganas de comer algo (casi siempre la tienes). La hembra es casi de la mitad de tu tamaño pero difícil de atacar, sin embargo sus hijos...eso sería pan comido. Además, esa cría podría convertirse en una competencia en un futuro. Y ni siquiera crees que pudieran ser tus parientes porque, bueno, los osos machos no cuidan a sus hijos, se aparean y después no vuelven a ver a la hembra ni a sus hijos, así que bien pudieran ser hijos de quien sabe quién. Convendría mejor que tuvieras tus propios hijos, y no siempre te topas con una hembra disponible. Ah, pero esta esta criando...o no. Entonces, matas a la cría y te la comes, la hembra da un poco de batalla pero una vez muerto su hijo, vuelve a quedar en celo (después de todo quiere perpetuar sus genes) y se apareará con el mejor (a veces único) macho disponible, que casualmente eres tú quien acaba de matar a su cría. Así que te alimentas de un gordito y tierno osito, y luego te disculpas con mamá oso permitiéndole ser madre otra vez cuando te apareas, Tu contento, ella compensada. Es una opción ganar-ganar.
Otra opción: te encuentras con un macho joven e inexperto, se esta abriendo paso en la vida apenas pero en unos años te podría derrotar. Lo matas y te lo comes. Adiós enemigo.
Cabe señalar que en este sentido, no se trata de que los osos razonen lo que está haciendo, simplemente se encuentra en su instinto y ha dado resultado por lo que se perpetúa dentro de la especie.
El oso polar es una especie bella y poderosa, y merece ser protegida para las generaciones futuras. Sin embargo, para proteger ésta y cualquier otra especie es necesario tener los pies en la tierra y conocer acerca de su biología.

Para ver más:

martes, 27 de octubre de 2015

David Attenborough habla sobre la dificultad de mostrar la realidad en un documental.

El aclamado naturalista sir David Attenborough, habla, en este video, sobre su opinión acerca de la belleza de la naturaleza, y también su brutalidad. En ocasiones, los fenómenos de la naturaleza resultan ser demasiado violentos como para ser mostrdos incluso bajo el frío lente de una cámara. Sin embargo, estos hechos brutales suceden, y no pueden -no deberían- cerrarse los ojos ante ellos. La percepción del público es muy sensible, las cosas que llegan a nuestro hogar a traves de pantallas nos vuelven sensibles ante muchas situaciones de las que, de otra forma, no nos veríamos enfrentados, y eso  también nos acerca a muchas cosas que no desearíamos ver. Tal como Attenborough comenta, en ocasiones, la línea es muy delgada.